Último fuego

Te miré lo suficiente
como para saber que
esto sólo podía ocurrir
una vez en la vida.
Así que no quería lamerme
una oportunidad perdida.
Personas como tú
no vuelven.
Y a pesar de ver
el precipicio que se asomaba
en sus labios,
me dejé caer en el fondo
de sus ojos.
Perdiéndome en su ombligo,
deslizándome entre sus piernas
buscando un calor
explosivo.
Imagina a alguien
que se relame igual
ante una herida
que ante una cama deshecha.
Te miré lo suficiente
como para saber que
que de entre todas las estrellas
que se esconden en el cielo
tu fuego era especial.

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